Las zapatillas las hice con tiempo porque quería que se
secaran bien, pero el resto de la tarta fue “exprés”. Iba a tener 13 niños en
casa el fin de semana y tenía muchas cosas que preparar. Quedó muy bonita
aunque con algún fallito que no pienso contar.
Lo de menos fue la tarta. Lo más importante fue lo que
disfrutó el fin de semana con sus amigas. Eso no tiene precio y recompensa el
cansancio y ¡el sueño que pasamos!
Felicidades princesa. Te quiero más…