Se que tengo el blog un poco abandonado, pero no me dan las horas. El día debería tener, por lo menos 30 horas, y aún así, no se si tendría tiempo para hacer todo lo que quiero.
Tenía muchas ganas de publicar esta entrada porque es una tarta que me hizo mucha ilusión. Era para el cumpleaños de Pepa, una diseñadora que ha puesto toda la ilusión del mundo en su proyecto y que, además hace unas cosas preciosas.